martes, 30 de agosto de 2011
Las dos Españas
Nuestro país está dividido en dos mitades: Los seguidores de Nesquik y los seguidores de Colacao. Esto está ocurriendo y desde aquí quiero confesar mi deslealtad. Soy una chaquetera, una tránsfuga, siempre fiel al Colacao hasta que probé el Nesquik. Ahora ya no hay vuelta atrás.
Y es que, además de que prefiero el sabor de Nesquik, es el cacao soluble ideal para los vagos (que somos muchos y cada día más) y las últimas campañas publicitarias de Colacao tampoco ayudan mucho ya que, en los últimos tiempos parecen estar especializándose en sacar niños repelentes. He aquí dos claros ejemplos:
Cierto que la mascota de Nesquik ha sufrido una transformación y va a acabar por convertirse en un cani de pura cepa.
Bueno, yo me he posicionado, ahora os toca a vosotros. En la columna de la derecha hay una encuesta. Votad y dentro de un par de meses veremos los resultados.
martes, 23 de agosto de 2011
The Freak Gate and the shadows keeper
domingo, 21 de agosto de 2011
De ser del montón a ser un mito
La Gioconda residió en diferentes hogares, entre ellos el lujoso cuarto de baño de Francisco I, el dormitorio de Luis XIV (el Rey Sol) y también en el de Napoleón hasta que en 1815 instalaron definitivamente el cuadro en el Museo del Louvre.
En 1911 visitar el Louvre no era como ahora, las largas colas que se forman en la puerta para entrar eran inexistentes y tampoco te encontrabas con esos grandes grupos de turistas. El ambiente que se respiraba en el museo era de tal tranquilidad que los pocos visitantes que había tenían la sensación de estar solos y los cuadros que se exhibían no estaban protegidos por las grandes medidas de seguridad actuales, es más, era habitual que las pinturas se descolgaran para fotografiarlas ya que el museo contaba con un novedoso estudio fotográfico, de hecho aunque el robo de La Gioconda tuvo lugar el día 21, no fue hasta dos días más tarde que el museo se dio cuenta de la desaparición.
El 23 de agosto los periódicos de medio mundo publicaban: ¡La Gioconda ha desaparecido! Entonces nació el mito ya que gracias a la educación básica obligatoria el número de gente que sabía leer había aumentado considerablemente, esto unido al auge de la prensa popular y al desarrollo de la fotografía comercial, hizo que el robo causara tanto revuelo que acabó convirtiendo a la Gioconda en el cuadro más famoso del mundo. Sólo las guerras habían recibido una cobertura periodística tan amplia.
Dos años tardó el cuadro en ser recuperado, tiempo durante el cual se formaban colas de miles de personas que acudían al museo para ver su ausencia en la pared.
Se contó con los mejores detectives de la época y con las técnicas más modernas para la investigación, durante la cual hubo diversos sospechosos. Se creyó que el ladrón podría ser algún millonario excéntrico, luego las sospechas apuntaron hacía el mundo del arte, llegando a ser acusados el padre del surrealismo Apollinaire e incluso el propio Picasso.
A pesar de todos los esfuerzos, las investigaciones no tuvieron ningún resultado, hasta que en el invierno de 1913 un hombre que se hacía llamar Leonardo se puso en contacto con un marchante de arte de Florencia (ciudad natal de la Gioconda) y con el director de la galería de los Uffizi y devolvió el cuadro, así sin más. No pidió nada a cambio.
Posteriormente el tal Leonardo (cuyo verdadero nombre era Vincenzo Peruggia) explicó que robó la Gioconda para devolverla a Italia. Al parecer Peruggia trabajaba como cristalero y chapucillas en París y a él le encargó el Louvre la fabricación de un marco de cristal para proteger a la Gioconda, por lo que Peruggia sabía de sobra como desmontarlo y llevarse el cuadro. Durante dos años la policía buscó a la Gioconda por todo el mundo y resulta que estaba a unas pocas manzanas del Louvre, en la casa de Peruggia. Aunque más tarde los psiquiatras determinaron que Peruggia no era lo suficientemente inteligente para haber llevado a cabo el robo él solo, el caso se acabó cerrando ya que comenzó la Primera Guerra Mundial.
jueves, 18 de agosto de 2011
Las juventudes hitleirianas, digo del Papa
Estos días he estado escuchando por parte de varios católicos como piden respeto. Tienen razón, cada uno puede tener las ideas que quiera y expresarlas como quiera, pero deberíamos recordar que la única vez que la iglesia y sus seguidores se movilizaron fue para manifestarse en contra de una ley que da derechos a los homosexuales. Ellos piden respeto pero, como hace siempre la iglesia, no predican con el ejemplo.
Otro ejemplo, el aborto es pecado, pero estos días no, pero bueno ¿esto qué es? O es pecado o no, no se puede cambiar según le convenga.
Durante siglos hemos visto como pone trabas al avance científico, por ejemplo, cuando se inventó el para-rayos la iglesia dijo que era pecado, que era un invento del diablo, ya que el rayo es un castigo divino, enviado por Dios para escarmentar a los pecadores y los hombres no podemos oponernos a la justicia de Dios. Algo parecido pasa hoy en día con la investigación con células madre, por poner un ejemplo, y yo lo que digo es que respeto sus creencias, respeto que no aborten, respeto que no usen condón, respeto que lleguen vírgenes al matrimonio, respeto que no se beneficien de los avances médicos que vayan en contra de sus creencias, incluso respeto que no coman carne los viernes, pero que ese respeto sea recíproco. Que respeten a la gente que no tiene esas creencias y no usen su poder político y económico para obstaculizar derechos que nos benefician a los que no profesamos su religión.
Los jóvenes que han ido al aeropuerto a recibir al Papa gritan: ¡esta es la juventud del Papa!, no cristianos, del Papa, eso dice mucho del asunto.
martes, 9 de agosto de 2011
Yippy-kay yay, motherfucker
Corría el año 1988 cuando John McClane pensaba: “Joder, también es casualidad que justo hoy, que vengo a buscar a mi mujer al curro, unos terroristas toman el edificio… Bueno, es una de esas coincidencias que se dan una vez en la vida…” Pobre, han pasado más de 20 y ya se está hablando del estreno de la 5ª parte… ¡Mala suerte, McClane!
Vamos a recordar la genial DIE HARD, que se tradujo en España como La Jungla de Cristal. Este título se adapta muy bien al argumento de la película, lo malo es que no tiene ninguna relación con las secuelas. Algo parecido ocurrió en Polonia donde se tradujo como La Trampa de Cristal.
Supongo que ya conoceréis el argumento así que al igual que hice en el artículo sobre Golpe en la Pequeña China contaré algunas curiosidades sobre esta película (que digo película, PELICULÓN):
-Originariamente el proyecto iba a ser la segunda parte de Commando. John Matrix (Arnold Schwarzenegger) iría a visitar a su hija Jenny a Los Angeles, ya mayor y convertida en ejecutiva de la Corporación Nakatomi. Finalmente no se llegó a ningún acuerdo entre Schwarzenegger y los productores que decidieron dar un nuevo giro al proyecto y cambiar el personaje de John Matrix por el de John McClane, un policía de Nueva York que visita a su mujer y se enfrenta a unos terroristas.
Así comenzó la búsqueda de un actor para interpretar a John McClane. La primera elección para el papel no fue Bruce Willis, en un principio se lo propusieron a Sylvester Stallone, Burt Reynolds, Richard Gere, Harrison Ford y Mel Gibson. Incluso se barajaron los nombres de Don Johnson y Richard Dean Anderson (aka McGyver).
-Una vez que se decidió que Bruce Willis interpretaría el papel principal, él mismo propuso a la actriz Bonnie Bedelia para que interpretara a su esposa.
-La raíz del argumento se basó en la novela de Roderick Thorp "Nothing Lasts Forever". Thorp publicó una novela llamada The Detective, cuyo protagonista era un policía retirado llamado Joe Leland y de la cual se realizó una adaptación cinematográfica en 1968 protagonizada por Frank Sinatra. Once años después la novela generó una secuela, Nothing Lasts Forever y se pensó en llevarla otra vez al cine y que la protagonizara Frank Sinatra de nuevo, pero por aquel entonces Sinatra tenía 64 años ya y se pensó que ya era muy mayor para dar vida a un héroe de acción, aunque después de ver la de Indiana Jones y la Calavera de Cristal… cualquier cosa es posible. El proyecto acabó olvidándose, hasta que McTiernan lo rescató en los 80.
-Entre la novela y la película hay muchas similitudes:
Joe Leland, un policía retirado al que identificamos como John McClane, llega a Los Angeles para visitar a su hija Stephanie que al tener muy mala relación con su padre usa el apellido de la madre, Gennaro. Va a verla a su trabajo en el edificio Klaxon Oil Corporation (Nakatomi Plaza), que está en obras. Están en plena fiesta navideña, cuando un grupo de terroristas alemanes liderados por Anton Gruber (Hans Gruber en la peli) toman el edificio. También aparecen personajes como el patrullero Al Powell (interpretado en La jungla de cristal por Reginald VelJohnson o mas conocido por ser el padre de la serie Cosas de casa, donde salía Steve Urkel), Harry Ellis (que en la novela es el novio de Stephanie), Karl (en la novela Leland también mata a su hermano pequeño) y el sr. Ríos (sr. Takagi en el filme).
-Otro dato curioso es que John McTiernan (el director) dejó un pequeño guiño para sus fans y es que el osito que lleva McClane es el mismo que lleva Jack Ryan al final de La caza del Octubre Rojo.
-Alan Rickman, que interpretó maravillosamente al villano Hans Gruber, debutó en el mundo del cine con esta película. Antes había trabajado en el teatro y en series para televisión, pero su primera película fue La Jungla de cristal.
-Al final de la película, cuando McClane, Holly y Al se ven en persona, la música que suena es de la película Bala Blindada (Man on fire, 1987) y cuando Karl aparece por sorpresa, también al final, e intenta matar a John y Al Powell le dispara, la música que se oye es la de Aliens.
-La frase Yippi-Ka yei es de una canción de Bing Crosby titulada I'm An Old Cowhand (From The Rio Grande) y que popularizó Roy Rogers:
-Por último me gustaría recordar a un actor que aparece en esta película, el típico actor al que todos reconocemos y del que nunca recordamos el nombre, os hablo de: AL LEONG. Ha participado en multitud de películas, siempre haciendo de esbirro del malo que acaba muriendo, además es un coreógrafo de artes marciales muy importante.
-Cuando John McClane va en limusina al Nakatomi Plaza ,Argyle, el conductor, le pregunta: ¿Le importa que ponga unas coplas?
Esta es la música que pone:
miércoles, 3 de agosto de 2011
The Young Ones y Bottom
Unos años más tarde Edmondson y Mayall se volvieron a unir en otra serie: Bottom (La Pareja basura). Trata sobre dos amigos, uno de ellos es alcohólico y el otro un salido pero los dos igual de perdedores, que comparten un pequeño piso mezcla entre leonera y pocilga. Un humor negro, bestial, grosero, diferente. Os va a encantar.
Otra cosa, no es por hacerme la lista, pero os aconsejo que las veáis en versión original (subtitulada, claro) porque con el doblaje pierden mucho.